Tout est calme
excepto la velocidad a la que escribo
a grandes trazos y desviados pensamientos se van llenando los subconscientes recuerdos
ahora tangibles, después terriblemente lejanos
TOUT EST CALME, menos el piano del vecino
No hay nadie en la calle
el gallo canta pausado
todo, incluso yo, está calmado
Por un momento el estruendo de los carros se silencia
la vida transcurre enmudecida
hay movimiento, pero sin ruido
todo parece estar calmado
1 comentario:
gente, gente, gente... sí, hay mucha gente, todos pasando y sin que ninguno tenga la cortesía de constatar el hecho de que existas... pero, nuececilla del alma, también hay flanes :)
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